Por Sofía Vargas Roberts

Cuando hablamos de estar comprometidos con un trabajo digno para Chile lo hacemos con hechos. En el tiempo que el Gobierno del Presidente Boric ha estado al mando, hemos logrado incorporar una serie de cambios importantes a las condiciones laborales, beneficiando a los trabajadores y trabajadoras sin que ello perjudique a las empresas o el Estado.

La semana pasada tuvimos un encuentro en la Sala de Cámara Municipal donde se explicaron los principales alcances de la Ley Karín, la cual permite proteger a los funcionarios públicos y trabajadores de prácticas abusivas en ambientes laborales. Legislación que entra en vigencia durante agosto.

También, la semana pasada la Ministra Jara comunicó que sigue avanzando el proyecto de equidad salarial, que tiene una consigna muy elocuente: “igual trabajo, igual salario” que busca abordar las aún presentes brechas salariales que existen en el mercado del trabajo y que directamente han perjudicado a las mujeres.  Entre las medidas que se establecen está el reconocer por parte de la Dirección del Trabajo y tribunales las vulneraciones fundamentales producto de la discriminación.

Esta medida se suma medidas como la Ley de Conciliación Familiar, el aumento del sueldo mínimo a 500.000 pesos, la ley de 40 horas semanales y velando por mantener un dinamismo en la economía estabilizando la inflación a fin de que no se vean afectados los costes de producción de las empresa y se puedan mantener los empleos. Por ello el compromiso del Gobierno es