Las actividades buscaron fortalecer la identidad cultural desde la primera infancia, promoviendo aprendizajes vinculados a la cosmovisión indígena y a los ciclos de la naturaleza.
En el marco del solsticio de invierno, jardines infantiles de la Junta Nacional de Jardines Infantiles (JUNJI) Atacama realizaron significativas ceremonias en distintas comunas de la región para conmemorar el Año Nuevo Indígena, también conocido como We Tripantu, Inti Raymi o Machaq Mara, según las tradiciones de los pueblos originarios.
“Desde JUNJI creemos profundamente que el respeto por los pueblos originarios comienza en la primera infancia. Estas celebraciones no son actos simbólicos, sino espacios vivos de aprendizaje, de identidad y de conexión con nuestras raíces ancestrales”, expresó Agustín Moreno, director regional de JUNJI Atacama.
Uno de los hitos destacados fue la celebración del jardín infantil étnico Inti Marka de Paipote, realizada en el territorio ancestral de la comunidad Colla en El Bolo, Copiapó. En la ceremonia se construyó una apacheta y se visitó el cementerio simbólico, como acto de respeto hacia los antepasados.
“Conmemorar el Inti Raymi en el mismo territorio ancestral es un acto de coherencia y respeto. Es enseñar a las nuevas generaciones desde la vivencia”, señaló Nidia Bordones, encargada del jardín.
En la comuna de Caldera, el jardín infantil Mi Primera Estación, junto a “Mi Pequeña Estrella” (SLEP) y la escuela Casa Khuyay, protagonizó una emotiva entrega de la Chigua al mar, rito tradicional del pueblo Chango, en la playa Mansa.
“Esta ceremonia nos permitió conectarnos con el mar como fuente de vida. Fue una experiencia profundamente emotiva y educativa para toda la comunidad”, comentó Valentina Díaz, directora del establecimiento.
En Vallenar, el jardín Verito Cortés Alcayaga realizó una jornada intercultural conmemorando el Día Nacional de los Pueblos Originarios, visibilizando la riqueza de etnias como la Mapuche, Aymara, Diaguita, Rapa Nui, Quechua y LikanAntai.
“Reconocer y celebrar esta diversidad en comunidad es parte de nuestra labor formativa y social”, expresó su directora, Sonia Zárate.
En Chañaral, el jardín infantil Semillas del Puerto celebró un nuevo We Tripantu con cantos, danza mapuche, ofrendas a la tierra y una fogata simbólica. Participaron estudiantes del CFT de Chañaral y familias de la comunidad educativa.
“Las culturas indígenas no son el pasado, son presente y también futuro. Queremos que nuestros niños y niñas crezcan valorando esa diversidad”, sostuvo su directora, Ximena García.
Jardines como Pecezuelos, Caracolito, Piolín, Naranjito, Amancay y Arco Iris, también desarrollaron actividades significativas como rituales de agradecimiento, presentaciones artísticas, ofrendas y espacios educativos que reforzaron la espiritualidad, el sentido de comunidad y la identidad cultural.
Estas experiencias forman parte del compromiso permanente de JUNJI Atacama con una educación intercultural desde la primera infancia, reconociendo la diversidad de saberes presentes en cada territorio de la región.