Por Sofía Vargas Roberts

En Chile un 89,3 por ciento de las personas de la comunidad LGBTIQI+ señalan haber sufrido algún grado de discriminación. Es tiempo que dejemos atrás este tipo de situaciones. Se debe avanzar en promover y profundizar la igualdad y el respeto por la identidad y dignidad de las personas.

Desde el Estado se ha trabajado en esta materia capacitando a funcionarios públicos, una labor que cabe destacar es la del Observatorio de Participación Ciudadana y No Discriminación, que busca precisamente que en espacios de servicios públicos no se vivan episodios donde se merme la dignidad de ciudadanas y ciudadanos por su identidad.

Muchos conceptos claves en esta fecha donde se celebra el orgullo de la diversidad, tienen que ver con el respeto y el cariño. Hay múltiples formas de expresar y vivir el amor, todas pasan por desear el bien de la otra persona. Esto va en distintos grados, y desde el rol institucional es un deber sumamente importante el velar por el respeto de toda individualidad, que se expresa libremente siempre.

Hoy como ayer, es muy necesario e importante hablar de estos temas. En un contexto donde se trata de desvalorizar el ejercicio sano del respeto y la individualidad, debemos poner en primer lugar la libertad de cada persona a expresar su ser y su identidad. En estos días donde se han visto carnavales y marchas defendiendo este derecho, es que como sociedad debemos celebrar las diversas formas en que la personas se expresan.